Quintín Cabrera nos ha dejado

QUINTÍN CABRERA BEDUCHAUD NOS HA DEJADO

Se nos ha ido uno de los cantautores más belicosos y representativos de la época de la dictadura franquista, con sus canciones de agitación y ácida sátira humorística, vitalista, sensible y tierno, siempre defendiendo las nobles causas perdidas, cantando a la libertad y a la solidaridad.

Sus pulmones ya no han resistido más y nos ha dejado, se ha marchado para seguir cantando sus canciones en otro espacio

La Asociación de Vecinos de Benimaclet de Valencia y la Librería Primado en el año 2006 nos pusimos en contacto con Quintín para que pudiera presentar su libro de poemas “Canciones” y un concierto de sus canciones para todo el barrio, tuvimos el placer de presentar el libro del bueno de Quintín en la librería de Miguel Morata “Librería Primado” y más tarde en un local del barrio llamado “Llar Cultural” intentó cantarnos Quintín pero ya no podía, su voz cascada por la enfermedad le impidió cantar, nos recitó sus canciones, nos contó parte de su vida y nos hizo partícipes de su gran humanidad. Fue por tanto una noche agradable, en la que Quintín se negó a cobrarnos, y puso como única condición ser aceptado para cenar junto a nosotros, y un lugar donde pasar la noche antes de regresar al pueblecito de Guadalajara donde residía.

En su libro Quintín nos transmitía todos sus sueños de caminar con sus canciones, con sus esperanzas y sus ilusiones, descubrimos al verdadero Quintín, más cercano, más interior que en sus recitales, todo el libro es puro amor, es todo muy natural, como de andar por casa, no hay cosas complejas, todo es muy llano, muy nuestro, muy humano. Quintín era un ciudadano del mundo, nos hacía sentir amor por su Uruguay, en uno de sus poemas dice ”Yo vengo de un país que ya no existe…y me siento compatriota de los barcos”, algunos dicen que Quintín era un milonguero de todos los exilios, un milonguero que creía en la libertad y que siempre se alzaba contra los sistemas que buscaban secuestrar a la cultura. El equipaje de Quintín era el amor, la nostalgia, la lucha, la luna, los hijos y sentirse uruguayo por haber nacido en todo el mundo.

Y como dijo algún sabio poeta, este mundo no es romántico, pero algunas personas si lo son, ellos son siempre nuestra esperanza y Quintín Cabrera era uno de ellos. Muchas gracias Quintín Cabrera Beduchaud.

Junta Directiva
A.VV.Benimaclet (Valencia)